Medición y Ahorro de Energía
No más derroche de energía
Muchos electrodomésticos, hogares y edificios consumen más energía de la que necesitan, lo que genera un desperdicio de energía. La eficiencia energética es la forma más fácil de eliminarla al utilizar menos energía para el mismo trabajo, lo que lleva a una reducción de las facturas mensuales de energía y hace que la energía sea más asequible para las empresas y las familias. Las soluciones de automatización de Espacios Inteligentes con productos Shelly pueden ayudarle a conseguirlo.
Las soluciones de automatización de instalaciones y hogares de Shelly pueden ayudarle a reducir su huella de carbono y sus facturas mensuales de energía hasta en un 40 %.
PASO 1
Conozca su consumo de energía
Los medidores eléctricos instalados en las casas toman una lectura al final de cada mes para determinar la factura mensual en función de las unidades de electricidad consumidas por cada hogar. El medidor de consumo de energía calcula la cantidad de energía consumida por varios aparatos y aparatos eléctricos y, por tanto, el importe a pagar.
PASO 2
Gestión inteligente de la energía mediante la automatización de procesos
Una vez que se monitorea y analiza el uso de energía, Shelly lo ayudará a tomar decisiones informadas sobre la administración de energía y maximizar los ahorros al brindarle la mejor solución de automatización de procesos posible basada en el análisis de energía y sus objetivos personales de eficiencia energética.
No más luces olvidadas
No vuelvas a preocuparte si has olvidado una luz encendida antes de salir al trabajo o de vacaciones en familia. Su hogar inteligente ahora puede notificarle si hay luces que funcionan fuera de su patrón habitual y permitirle apagarlas de forma remota, lo que reduce el desperdicio de energía.
En días muy soleados, utilice funciones de programación inteligente o un sensor de control dinámico de las persianas para optimizar el funcionamiento del sistema de aire acondicionado. Configure las persianas o cortinas automáticas para que se cierren durante las horas del día en que el sol brilla sobre sus ventanas y, además, calienta la habitación. De esta forma, el sistema de aire acondicionado no tendrá que compensar el calor aumentando su potencia de trabajo y ahorrará energía. ¡Y no te preocupes por perder la agradable luz del día! Una vez que se acerque la hora de la tarde, las persianas se volverán a abrir automáticamente.